La coalición liderada por Arabía Saudí ha atacado el aeropuerto de Sanaa en Yemen alcanzando, entre otras cosas, un avión de transporte Ilyushin Il-76TD (versión civil del Il-76MD) que acabó destruído, como atestiguan las siguientes fotografías...
Pero al final mi conclusion es que los pueblos tienen lo que se merecen. En el caso de Yemen, esta gente esta en una guerra de todos contra todos desde hace decenas de años. Normal que ante tal situacion otros les ataquen para defender sus intereses. El mundo es asi y si tu no te resperas otros no lo van a hacer por ti.
Yemen sólo es un escenario más de la lucha por la supremacía en el mundo islámico entre sunís y chiís. Como Siria.
El último repunte que ha desencadenado la entrada en escena de Arabia Saudí y sus aliados es que el bando chií, o sea, el que tiene detrás a Irán, estaba ganando y ha traído consigo que el otro bando, el suní encabezado por Arabia Saudí, haya tomado parte directa.
Cuando Arabia Saudí consiga imponer su bando a base de aplastar al otro bando, al iraní, todo volverá a una calma más o menos estable.
Puede que el conflicto se enquiste pero los chiís no tiene posibilidades de vencer en Yemen porque el bando suní es más fuerte y, además, es el apoyado por EEUU y Europa.
Nadie apoya a Irán.
Mientras que un bando, el suní, puede recibir apoyos militares y municiones y etc el otro, el chií, no. No sólo la coalición internacional encabezada por Arabia Saudí trata de impedir el abastecimiento sino que EEUU y a sus aliados también colaboran para evitarlo con lo que Irán tiene pocas posibilidades, siendo generoso, de poder pertrechar a los chiís en Yemen. O por mar o por aire y tanto de una forma como de otra sus buques o sus aviones son facilmente detectados y obligados a desistir en el intento, como ocurrió unas semanas atrás con un convoy naval iraní.
No hay que engañarse, occidente apostó por un bando para que este no complicase el suministro de gas y petróleo y ese bando, el suní, ya puede liar la más gorda que se nos pueda ocurrir que se le pasará por alto como si no hubiese ocurrido nada.
Y sino sólo hay que ver lo que hace Arabia Saudí o Qatar porque de ahí han salido los principales actores del terrorismo internacional en las últimas décadas y, además, el régimen Saudí lleva a cabo castigos mortales tan condenables como los que aplica el Estado Islámico y a Ryad no le dice nadie nada y a los terroristas del Estado Islámico se les condena -con razón- en todos lados y esto es así simplemente porque Arabia Saudí es nuestro aliado y el Estado Islámico no.
Así que sí, si ganan los sunís nos espera una buena.
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Pues es una pena, porque es evidente que el avión no servía para nada.
ResponderEliminarSaludos.
Hola
ResponderEliminarYa se vió en Irak, consiste en arrasar sin mirar el qué dirán y luego reponer sacando tajada de ello.
No hace falta reponer con lo propio o con lo de los amigos. Simplemente con ofrecer el crédito para ello es suficiente.
Que pregunten en Irak.
Pero al final mi conclusion es que los pueblos tienen lo que se merecen. En el caso de Yemen, esta gente esta en una guerra de todos contra todos desde hace decenas de años. Normal que ante tal situacion otros les ataquen para defender sus intereses. El mundo es asi y si tu no te resperas otros no lo van a hacer por ti.
ResponderEliminarHola
ResponderEliminarYemen sólo es un escenario más de la lucha por la supremacía en el mundo islámico entre sunís y chiís. Como Siria.
El último repunte que ha desencadenado la entrada en escena de Arabia Saudí y sus aliados es que el bando chií, o sea, el que tiene detrás a Irán, estaba ganando y ha traído consigo que el otro bando, el suní encabezado por Arabia Saudí, haya tomado parte directa.
Cuando Arabia Saudí consiga imponer su bando a base de aplastar al otro bando, al iraní, todo volverá a una calma más o menos estable.
Pues ya pueden ganar los chiitas, porque si ganan los sunies, de calma, poco o nada...
ResponderEliminarHola
ResponderEliminarPuede que el conflicto se enquiste pero los chiís no tiene posibilidades de vencer en Yemen porque el bando suní es más fuerte y, además, es el apoyado por EEUU y Europa.
Nadie apoya a Irán.
Mientras que un bando, el suní, puede recibir apoyos militares y municiones y etc el otro, el chií, no. No sólo la coalición internacional encabezada por Arabia Saudí trata de impedir el abastecimiento sino que EEUU y a sus aliados también colaboran para evitarlo con lo que Irán tiene pocas posibilidades, siendo generoso, de poder pertrechar a los chiís en Yemen. O por mar o por aire y tanto de una forma como de otra sus buques o sus aviones son facilmente detectados y obligados a desistir en el intento, como ocurrió unas semanas atrás con un convoy naval iraní.
No hay que engañarse, occidente apostó por un bando para que este no complicase el suministro de gas y petróleo y ese bando, el suní, ya puede liar la más gorda que se nos pueda ocurrir que se le pasará por alto como si no hubiese ocurrido nada.
Y sino sólo hay que ver lo que hace Arabia Saudí o Qatar porque de ahí han salido los principales actores del terrorismo internacional en las últimas décadas y, además, el régimen Saudí lleva a cabo castigos mortales tan condenables como los que aplica el Estado Islámico y a Ryad no le dice nadie nada y a los terroristas del Estado Islámico se les condena -con razón- en todos lados y esto es así simplemente porque Arabia Saudí es nuestro aliado y el Estado Islámico no.
Así que sí, si ganan los sunís nos espera una buena.